Imagen referencial. Crédito: Pixabay / Dominio público.
6 de julio de 2022 - 8:45 PM
POR DAVID RAMOS | ACI Prensa
Un sacerdote católico destacó cinco claves de la nueva carta apostólica “Desiderio desideravi” del Papa Francisco sobre la liturgia.
El 29 de junio, en la Solemnidad de San Pedro y San Pablo, el Papa Francisco publicó su carta apostólica "Desiderio desideravi", en la que busca enviar un mensaje a todos los católicos sobre la formación litúrgica.
En su carta, entre otros puntos importantes, el Santo Padre subrayó que “el arte de celebrar no se puede improvisar. Como cualquier arte, requiere una aplicación asidua”.
Además, precisó que “todos los bautizados” están llamados a una celebración correcta d ela liturgia.
En declaraciones a ACI Prensa, el P. Francisco Torres Ruiz, sacerdote de la Diócesis de Plasencia (España) y Profesor de Liturgia, expuso cinco claves del nuevo documento del Papa Francisco:
1. El significado del título de la carta, “Desiderio desideravi”
El P. Torres Ruiz indicó que el título de la carta apostólica “está tomado del Evangelio de Lucas, cuando el Señor dice ‘he deseado ardientemente comer esta Pascua con vosotros’”.
“Por tanto, el Papa lo que quiere hacer es situarnos en ese momento en que Jesús instituye la Eucaristía y el orden sacerdotal”, señaló.
El sacerdote español indicó que esa “podríamos decir que es la primera liturgia que el Señor celebró con sus apóstoles, en la que nos dio también el mandamiento nuevo del amor. Sacerdocio, Eucaristía y amor son 3 caras de un mismo misterio, que es el misterio profundo del corazón sacerdotal y eucarístico de Jesucristo”, destacó.
2. En la Liturgia se actualiza la obra redentora de Jesucristo
El Profesor de Liturgia destacó que “Desiderio desideravi” es “una carta breve y de muy fácil lectura”, en la que el Papa Francisco muestra la relación entre la historia de la Salvación y el misterio de la Liturgia.
“De hecho, podemos decir que en la liturgia se sigue celebrando y actualizando la obra redentora de Jesucristo, que ya se inició desde la creación, se inició también después del pecado de Adán y Eva, cuando se promete El Salvador, y que con la Encarnación y la redención del Señor se lleva a cumplimiento definitivamente”, indicó.
3. Una invitación a redescubrir la Liturgia
El P. Francisco Torres Ruiz indicó que en su carta apostólica “el Santo Padre invita a la Iglesia a redescubrir ese misterio y esas riquezas insondables del Corazón de Cristo, que se despliegan para su pueblo en la celebración de la Santa Misa, en la celebración de la Santa Liturgia”.
El sacerdote español subrayó que en su documento el Santo Padre “nos llama a no caer en excesos”.
“Esto es interesante resaltarlo, porque el Papa aquí no se casa con nadie y advierte de los errores y de los abusos litúrgicos que tanto por un lado como por otro pueden cometerse”, dijo.
“Y es que cuando no se tiene una formación litúrgica adecuada, es muy normal caer en las creatividades y en los abusos litúrgicos que muchos celebrantes caen”, advirtió.
“De ahí que el Papa termine su carta apostólica haciendo una reflexión sobre el Ministerio de la Presidencia en la liturgia”, añadió, pues “el Presidente de la Liturgia debe ajustarse a las rúbricas y a la normativa dada por el propio Misal, y no a sus gustos y preferencias personales”.
4. No impone ni abole nada
El P. Torres Ruiz destacó que “esta carta apostólica no pretende imponer nada ni abolir nada. Son simplemente, y así lo dice el Santo Padre, unas reflexiones que él quiere compartir con todo el pueblo de Dios, dada la guerra litúrgica que se ha vuelto a abrir recientemente sobre la forma de celebrar la Misa”.
Esta “guerra litúrgica”, dijo, “parecía haber sido cerrada y pacificada por el Summorum Pontificum de Benedicto XVI”, pero se habría reabierto con la carta apostólica Traditionis custodes, “quizás por las malas interpretaciones o las interpretaciones abusivas que de un lado y de otro se han dado”.
Con su carta apostólica Traditionis custodes, publicada en julio de 2021, el Papa Francisco reguló la celebración de la Misa en la forma extraordinaria, es decir con el Misal anterior a 1970, y modificó las disposiciones incluidas en Summorum Pontificum.
Lejos de prohibir la celebración de la Misa tridentina, el Papa Francisco dispuso que cada obispo la supervise y apruebe.
El sacerdote español subrayó que “el Papa quiere la riqueza litúrgica, pero también entiende que la reforma del Concilio Vaticano II es actualmente la que debe regir la vida y la celebración de la misma Iglesia”.
5. Apela a obispos, sacerdotes y laicos
Al finalizar, el P. Torres Ruiz indicó que es importante “profundizar mucho” en esta carta apostólica, “que nos invita a una sana y buena formación litúrgica para el pueblo de Dios, empezando por el ministerio jerárquico, es decir, obispos, presbíteros y diáconos”.
Además, dijo, esto atañe a “la totalidad del Pueblo de Dios que asiste, que participa y que se une a la acción sacerdotal de Jesucristo a través de los ritos y plegarias que confeccionan todo culto litúrgico”.
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